Le apasionan sus clientes de inmigración tanto como sus otras áreas del derecho, reconociendo la valentía de cada nuevo comienzo. Para ella, cada inmigración es una lucha por la esperanza, las familias y la continuidad. «La inmigración no es mero papeleo, sino que tiene que ver con las personas, sus aspiraciones y su futuro». Manteniéndose conectada a su amor a Dios y a la ayuda, su diversa actividad incluye el ciclismo, los viajes y la familia, y sigue sirviendo, educando a su comunidad y apoyando causas dedicadas al bienestar infantil, la educación y los sin techo.
En Coleman Law Group, Constance se asegura de que su equipo no sólo sea experto en lo que hace, sino que también comprenda la empatía y la compasión que requiere tratar con las complejidades de la vida de las personas. Sus clientes confían en ella no sólo por sus conocimientos jurídicos, sino también por el corazón que pone en cada caso y su determinación por la justicia.
Constance ha construido una carrera basada en la compasión, el propósito y la creencia genuina de que fue «hecha con un corazón para la gente». Incluso antes de convertirse en abogada, Constance tuvo el profundo privilegio de conectar con todo tipo de personas y vivir sus vidas, lo que le ayudó a desarrollar la empatía y la resistencia que utiliza hoy en su paso por la abogacía. Trabajó en la oficina del defensor público, en la fiscalía y, más tarde, como abogada litigante en Florida. Tras perder a su hermano en un accidente de moto, la vida de Constance cambió para siempre. Esa experiencia la encaminó hacia el trabajo y la pasión de por vida por el derecho de lesiones personales, así como hacia la pasión por servir con corazón y agallas a las personas afectadas por accidentes.
Constance también presta servicios en torno a la ley de inmigración, ayudando a personas y familiares a buscar una vida segura, brillante y viable en Estados Unidos. Tanto si defiende a un lesionado como si guía a un inmigrante a través de un proceso que le cambiará la vida, Constance atiende a sus clientes con un cuidado natural, una defensa celosa y el deseo de dejar huella: un cliente cada vez, una historia cada vez, un proceso de curación cada vez.
Por eso, cuando eliges a Constance D. Coleman, no sólo estás eligiendo a una abogada feroz y digna de confianza, sino también a una oyente compasiva y a una aliada de confianza que cree en ti y quiere marcar la diferencia.